viernes, 22 de junio de 2007

Manifestación Antitaurina y II

viene de aquí
Es lo más parecido a dos aficiones de futbol que he visto. Ambos grupos
intercanviandose insultos y haciendo uso del dedo anular. A mi lado una cuarentañera bien, perfectamente teñida, con gafas de diseño y tejanos impecables haciendo cortes de manga como una posesa a un jubilado taurino. Los mossos le pegan un empujón a un joven que pretendía intercanviar opiniones con un fan de José Tomás. Las chicas del servicio de orden (sí, son todas chicas, son guapas y se lo curran) calman al joven y aconsejan serenarse. Alguien grita de entrar en tromba al coso, al más puro estilo peliculero de Octubre.

Los taurinos no se quedan cortos. Un cuarentón barrigudo exhibe una bandera española (constitucional) de manera desafiante. ¿Qué creeá que somos? En general en la otra cera la edad media es superior a la nuestra. Abunda el matrimonio de 50 o 60 años, superarreglados, clase media-alta, alta. Veo a unos abueletes bajar de un mercedes negro. Decepción! No son famosos, de hecho no veo a ninguno. Pero gritamos estupideces sobre Jesulín que hace reir a un barbudo mosso. En mi opinión estan sorprendidos. Acostumbrados ya a unas decenas de antitaurinos, les sorprende la muralla de furgonetas antidisturbios y el griterío, que les da una idea de la magnitud de la masa humana que hay detras de estas.

A quien sí veo es a los candidatos del PACMA, Núria Campdepadrós y Pere.

Ciertamente los 18.000 espectadores que han acudido a la plaza son más que los manifestantes antitaurinos. Pero, en mi opinión, esto ha sido el cante del cisne del toreo en Barcelona. No pasan de 6000 los que acuden domingo tras domingo. Y no ha mejorado con El Juli y otros matadores que han actuado con el cambio de gerentes. No se si se cubren gastos, pero el beneficio económico será, si lo hay, muy poco. José Tomás no va a venir cada domingo... y como les gritamos a los aficionados:

Cada año somos más... y cada vez tenemos más respaldo social y político



1 comentario:

Butzer dijo...

Ahí está, el reportero bombero, siempre informando. Por cierto, se me ha pegado el ritmillo de los tambores...jeje